El vino ofrece a Chile el lado positivo de la guerra comercial
China impuso en abril impuesto adicional del 15% a los vinos estadounidenses en represalia por los aranceles estadounidenses al acero y al aluminio.
- T+
- T-
Días después de que el presidente Donald Trump intercambiara los últimos dardos en una creciente guerra comercial con China, los productores chilenos de vino detectan una oportunidad.
Productores como Concha y Toro buscan expandir sus envíos a China, que ya es el mayor mercado de exportación de vinos de Chile, luego de que las autoridades del gigante asiático impusieran en abril un impuesto adicional del 15% a los vinos estadounidenses en represalia por los aranceles estadounidenses al acero y al aluminio.
Es un pequeño aspecto positivo en una disputa comercial de “ojo por ojo” que ha reducido drásticamente el precio del cobre, que representa poco más de la mitad de las exportaciones chilenas y miles de millones de dólares al año en inversión extranjera. Los productores de vino quieren reemplazar la mayor parte de los US$75,6 millones que sus contrapartes en Estados Unidos exportaron a China el año pasado, parte de ello en vinos premium, lo que se suma a la creciente demanda de la nación asiática.
"Los importadores se preguntarán dónde pueden conseguir vinos premium a un precio más bajo", dijo Jorge Barros, director comercial de Chilean Grape Group, el cuarto mayor exportador de vinos chilenos. "Chile está listo para satisfacer esa demanda". China superó en 2016 a EE.UU. como el mayor mercado para los vinos chilenos, aumentando las importaciones en un 27,5 por ciento a US$267 millones.
Los inversionistas son optimistas respecto de las perspectivas de un mayor crecimiento en tanto una moneda más débil impulsa los ingresos corporativos en dólares. Las acciones de Viña Concha y Toro han tenido el mejor desempeño este año entre los miembros del índice IPSA con un alza del 16 por ciento, frente a una pérdida del 5 por ciento para el índice. El peso se ha depreciado un 5,3 por ciento en el mismo lapso.
Rápida Expansión
El mercado chino del vino se está expandiendo rápidamente. En la década de 1990, China experimentó un auge del vino con un crecimiento del consumo de un 20 por ciento anual durante más de una década. En este período, los vinos de lujo eran populares entre las autoridades de gobierno que intercambiaban costosos vinos franceses entre ellos a modo de regalos, dijo Barros.
Luego, el presidente Xi Jinping restringió en 2012 los regalos de lujo en una campaña contra la corrupción, incluidos los licores premium. Desde entonces, la floreciente clase media de China comenzó a beber más vino, y se espera que el consumo aumente en más de un tercio a US$23.000 millones en los próximos cinco años, según un informe de IWSR, firma de análisis de mercados de bebidas.
Aprovechar la oportunidad
Chile ha sido rápido en aprovechar la oportunidad, convirtiéndose en el tercer mayor proveedor del mercado después de Francia y Australia. Rodrigo Jackson, gerente regional para China y Asia Central de Concha y Toro, el mayor propietario de viñedos del mundo y principal exportador de vinos de Chile, dijo que China es el motor de crecimiento de la industria en todo el mundo.
"Es un mercado joven que se está desarrollando muy rápidamente", dijo Jackson. "Francia tiene su historia y Australia ha tenido éxito en vinos premium, pero China es la oportunidad para que Chile se posicione como un productor premium".
El precio promedio actual de una caja de nueve litros de vino estadounidense importado por China es de US$70, en comparación con solo US$32 para el vino chileno, según Intelvid, una base de datos de exportación de vinos.
La asociación chilena de productores de vino, Wines of Chile, ha invertido en campañas centradas en los consumidores para elevar el nombre –y el precio– de los vinos chilenos en China. Angélica Valenzuela, directora de la organización, dijo que el objetivo para 2025 es centrarse en vinos premium por un valor de US$60 o más por caja.
Si bien ella cree que las actuales brechas arancelarias entre dos principales mercados de exportación pueden cambiar la demanda en el corto plazo, el enfoque es el posicionamiento a largo plazo para la marca chilena, dijo Valenzuela.
"Estamos trabajando para consolidar a Chile como el productor número uno de vinos premium, sostenibles y diversos en el nuevo mundo", dijo.